Hoy rendimos homenaje a quienes representan la esencia de CHM: las personas que, con su trabajo, compromiso y pasión, han contribuido a levantar la historia de esta empresa.
Charlamos con Froilán Luzón, jefe de obra, que lleva más de 24 años en el equipo. Su trayectoria resume la evolución de CHM y, sobre todo, el valor humano detrás de cada proyecto.

Trayectoria y comienzos
P. ¿Cómo fueron tus primeros pasos en CHM?
“Comencé mi carrera en CHM, no ha habido otra empresa. Desde el primer día me sentí parte de una gran familia.”
P. ¿Qué recuerdas de aquellos primeros años?
“Tuve la suerte de ser acogido por un equipo que me ayudó a integrarme, aprender y sentirme cómodo. Aquellos años fueron fundamentales para crecer como profesional.”
P. ¿Qué te motivó a incorporarte?
“Cuando tuve la oportunidad de incorporarme, supe de un antiguo compañero de carrera que ya trabajaba en CHM. Todo lo que me contó sobre la empresa me animó aún más: el ambiente, la seriedad y la proyección que se percibía.”
Primeros hitos: Froilán recuerda con especial cariño sus obras en Andalucía y, más adelante, su participación en el desdoblamiento de la carretera Elche–San Fulgencio, donde pudo dirigir un proyecto integral con equipos propios de CHM: movimiento de tierras, planta de suelocemento y aglomerado.
“Fue una experiencia muy completa. Trabajábamos con nuestros equipos de movimiento de tierras, planta de suelocemento y aglomerado. El resultado fue un éxito, pero lo más valioso fue el aprendizaje y la satisfacción del trabajo bien hecho.”
Experiencia y valores
P. Has visto crecer la empresa. ¿Cómo describirías esa evolución?
“Cuando empecé, nos conocíamos todos. Éramos una familia pequeña. Hoy CHM ha crecido mucho, se ha modernizado y ha sabido adaptarse. Se nota en los sistemas de gestión, en los desarrollos de I+D+i, en la digitalización y en la profesionalización de todos los procesos.”
P. Si tuvieras que elegir valores clave de CHM…
“La seriedad, la eficacia, el desarrollo constante y, sobre todo, la apuesta por sus trabajadores.”
El factor humano también ocupa un lugar central en su discurso:
“El valor de las relaciones personales es esencial. Cuidar los vínculos con los compañeros crea entornos amables, y eso repercute directamente en nuestro bienestar y en los resultados de cada obra.”
Retos y aprendizajes
Uno de los mayores desafíos profesionales que recuerda fue en la obra Elche–San Fulgencio, optimizando los recursos propios de CHM:
“No solo había que gestionar la obra, sino coordinar nuestros equipos y materiales para que todo funcionara con la máxima eficiencia. Fue un doble reto, y lo superamos gracias a la implicación y profesionalidad del equipo. Nunca olvidaré la ayuda de Joaquín García, ‘El Maestro’, un encargado excepcional del que aprendí muchísimo.”
Pero si hay una obra que lo marcó especialmente, fue la ejecución de pantallas acústicas en la línea de Alta Velocidad entre Caudete y Alicante:
“Fue un proyecto exigente, con plazos muy ajustados y mucha presión. Aun así, logramos cumplir los objetivos y recibir la felicitación del cliente. Esa satisfacción no se olvida.”
Visión y futuro
Adaptación y solvencia: “CHM ha demostrado estar a la altura allí donde otras empresas han abandonado. Su capacidad de adaptación es una de sus mayores fortalezas.”
Hoja de ruta: “El futuro pasa por seguir apostando por la mejora continuathe sustainability and the adaptación al cambio climático. Habrá menos obra nueva, pero más necesidad de mantener y optimizar las infraestructuras existentes. CHM está preparada para asumir ese papel.”
Consejo a quienes empiezan: “Que traten de hacer de su trabajo un lugar donde disfrutar. Solo así se puede dar lo mejor de uno mismo.”
Cierre
P. Si tuvieras que definir CHM en una palabra…
R. “Aunque usaría dos, diría que es mi casa. Después de más de 24 años, eso es exactamente lo que siento.”
Gracias, Froilán, por tu compromiso, tu ejemplo y por formar parte de la historia de CHM. Tu trayectoria inspira a quienes construyen hoy el presente y el futuro de esta empresa.
